31 de octubre de 2015

Noche de Ánimas


El día de todos los Santos, y la Noche de las Ánimas en La Almolda.
Desde hace unos años estamos siendo invadidos por una tradición de fuera, y cada vez más se está estableciendo como algo normal el celebrar el día de Halloween. Se ha instaurado ya de tal modo que hasta en los colegios se celebra, ya no es cosa de los grandes comercios para vender. Quizá lo bueno de esto sea que a la gente a la que no le guste, o a la que le parezca estúpido celebrar algo de otra cultura comience a interesarse por ritos de la nuestra ya perdidos.






Con esta motivación hemos estado preguntado a la gente mayor y recordando que se hacia cuando eramos niños, y la sorpresa es que no es algo tan distinto a lo que nos viene de fuera.









Ahora la única tradición que queda en La Almolda es la de llevar flores a la tumba de nuestros seres queridos y encender alguna vela, pero no hace tantos años además de esto se realizaban otros ritos.
Hace 50 o 60 años, los niños de La Almolda recogían latas y les hacían agujeros con un clavo. Dentro de esa lata ponían una vela que encendían al atardecer, y le llamaban "la calabera"; alrededor de esta cogidos de la mano jugaban y cantaban los días anteriores a Todos los Santos. También me han contado que antes de que hubiera latas se utilizaban pimientos, e imagino que como en otros pueblos de Aragón se utilizarían calabazas (aunque de alguna otra variedad). 
Por la noche, en las casas con la familia, se encendían lamparillas de aceite y se rezaba por las almas tres partes del rosario. La luz o las velas siempre han estado muy presentes en la noche de difuntos, se encendían por las almas perdidas en la familia. En algunos sitios las colocaban cerca de las ventanas, por temor a que fuera hubiera almas perdidas o en pena y arrastraran a su oscuridad al que se acercara.  
Al día siguiente de todos los Santos, se hacia misa en el cementerio por todas las almas, tradición que aún se conserva. 

Cementerio de La Almolda


Si vamos más atrás en el tiempo, el historiador Antonio Beltrán, apunta que en La Almolda se celebraban ritos muy interesantes. Se realizaban ofrendas de pan y luces en las sepulturas, y como hemos dicho antes, lo de las velas aún hay gente que lo hace. Pero el rito en cuestión era más complejo. Se llevaba el pan en una cesta  con la vela o candela encendida colocada en el asa. Esta vela o candela podía ser de las que se bendecían el día de la Candelaria (el día 2 de febrero; fiesta que aún se celebra ya que es la patrona de la Iglesia Parroquial del pueblo). Este rito, con algunas variantes esta o estaba muy extendido por el norte de España. 


Cementerio viejo de La Almolda.




















Otro impresionante rito desaparecido, es el de las comidas sobre las tumbas del cementerio relacionado con ofrendas de alimentos, reminiscencias de los grandes festines funerarios de los romanos, semejantes a los de los antiguos cristianos, y muy relacionados con las "comidas de muerto" en las casas o el reparto de pan bendecido en los entierros. 

Y para finalizar un cuento que ha todos nos han relatado sobre la noche de las animas, ese de un joven que para probar su valentía se acercó en la noche de los difuntos al cementerio. Cuando estaba ya en la puerta del campo Santo, sus ropas se engancharon en un clavo, y al moverse y verse sujeto por algo, tal fue su temor, que pensando que algún alma en pena le había agarrado y sin percatarse de la realidad, murió de miedo. Así que, aunque son otros tiempos no acercarse al cementerio en plena Noche de las Ánimas, es lugar prohibido para los vivos!!!

1 comentario:

Anónimo dijo...

MOOLA¡¡¡
https://identidadaragonesa.wordpress.com/2013/10/29/la-noche-de-las-animas-en-aragon/